miércoles, 9 de febrero de 2011

Orden / Dispersión


Orden / Dispersión 
Manuel Hernández
Museo de Arte Universidad Jorge Tadeo Lozano.


Orden Dispersión en Manuel Hernández.

Por: Angie Lorena Melo L.


El trabajo experimental con la geometría y el color son características propias de las obras de Manuel Hernández, quien donó algunas de sus pinturas al Museo de Arte de la Universidad Jorge Tadeo Lozano. Es allí, donde se encuentra esta obra expuesta, en la categoría de Orden/ dispersión.

A primera vista, los trazos en distintos sentidos no tienen un significado inmediato para el receptor, pero el juego que hace el artista con los colores y las pinceladas da un toque emocional a la obra. En este caso, el artista hace uso de colores como el amarillo, el rojo, el blanco y el negro.

La composición es un poco dispersa, pero a la vez es ordenada. Los signos que usa se pueden interpretar desde diferentes puntos de vista. Para muchos espectadores podría ser la reunión de pinceladas en diferente posición y con distintas texturas, pues algunas de ellas dan la sensación de ser un poco ásperas. 

Para otros, por el contrario, todo tiene un sentido que se ve comunicado en el centro de la obra, pues la posición y forma de los trazos y colores terminan en un equilibrio que da la sensación de que allí hay dos personas besándose. Este equilibrio se logra por la manera como están dispuestos los colores, pues parece que la obra estuviera dividida de manera oblicua. En la esquina inferior la base es el color blanco y sobre este hay un juego de grises y negros muy sutiles, que transmiten pureza y tranquilidad. En la esquina superior el color que más sobresale es el amarillo, lo que le da a la obra una sensación de calidez; que además transmite cierta interacción con el espectador, pues al ser cálida se convierte, quizás, en una obra acogedora.

Al tener algunos trazos que se asemejan a una pareja besándose, quizás recién casados porque la posición de los trazos y colores permiten que haya similitud con un hombre vestido de traje y una mujer vestida de blanco, se logra profundidad en la pintura pues se da cierto sentido de dimensionalidad. Es decir, es como si la pareja estuviera en frente y detrás de ellos los demás trazos y colores forman el ambiente al que se le resta importancia.

El estilo de este artista, que siempre intenta por medio de los símbolos que usa en sus obras comunicar sentimientos y miradas emocionales, se confirma en esta obra que a lo mejor fue realizada con la intención de mostrar amor y calidez en medio del orden, y a la vez la dispersión.

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