En esta muestra fotográfica presentan una faceta desconocida de Fernell Franco, donde los curadores José Falconi y Ángela Gómez expresan que el artista tiene “una nueva manera de concebir la fotografía, con amplias posibilidades más allá del registro inmediato y de la bidimensionalidad que caracteriza este medio”.
Fernell Franco pretendía experimentar los efectos de la luz y la sombra, no creía necesario registrar el tiempo. En el primer tema “procesos” se demuestra los problemas de la narratividad del tiempo, y la inquietud por el deterioro de la arquitectura de Cali. Al observar las imágenes se evidencia una obsesión por mantenerse en el pasado y por mostrar el abandono de lugares.
En la otra parte de la exposición llamada “bocetos” se aprecian trabajos de Franco como “estudios preparatorios” o “trabajos no acabados”, donde la selección de imágenes constituía un análisis profundo, después de tomar fotografías, se encerraba en su estudio para meditar su trabajo. Esta dedicación está reflejada en sus obras.
Aunque, existen personas que afirman que Fernell Franco registraba de inmediato, podría decirse que este fotógrafo tenía planeada la imagen. Sin embargo, esta improvisación generó una constante lucha por la perfección, Franco examinaba sus productos para pulir sus fotografías.
Al analizar la exposición, se puede decir que no es una faceta desconocida de Fernell Franco, si no una manera más detallada de mostrar una realidad.
Por ejemplo, en su serie amarrados los elementos que aparecen emiten violencia. Al igual que en las fotografías de la exposición “una impecable soledad” producen una fuerza impactante en el público.
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