(Contradicción al artículo de Lucas Ospina La Musa Fea, publicado en la Revista Arcadia) http://www.revistaarcadia.com/arte/articulo/la-musa-fea/24406
Lucas Ospina escribió para la Revista Arcadia el artículo ‘La musa fea’ en donde hizo una fuerte crítica al 42 Salón Nacional de Artistas que se realizó en Cartagena. Afirmó que a pesar de sus setenta años de trayectoria “no llama la atención y difícilmente hará que los turistas le hagan el viaje, que los patrocinadores se peleen por colgarle un logo y menos aún que las chicas del ‘maravilloso mundo del espectáculo’ de nuestra ‘tele’ hagan cubrimiento”. Pero a pesar de la opinión de Ospina, el Salón Nacional de Artistas es una oportunidad para que los colombianos y en especial nos cartageneros se enteren de lo que está pasando en el mundo del arte, debido a que ofreció 8 diferentes exhibiciones en varias salas de la ciudad de Cartagena además de 6 curadurías nacionales… “una muestra de artistas internacionales y una exposición sobre los resultados de los proyectos desarrollados por creadores de diferentes regiones del país en la región Caribe colombiana.”[1]
Aunque para Ospina el ‘evento’, perdón el ‘encuentro’ o no mejor el ‘festival’, todo menos un salón, fue un desorden total, o en palabras de él: “es un galimatías que desborda los límites de la paciencia”, para mí fue sólo una iniciativa para que el arte del 42 Salón Nacional de Artistas no sólo se quede en un sitio, sino que “reivindica el Caribe colombiano como espacio estratégico para el diálogo intercultural entre el territorio insular y el país continental, activando trazos históricos que sirvieron de trayecto a lo que hoy es la dinámica cultural en la región.”[2] La agenda académica del Salón Nacional de Artistas en su versión 42 fue muy completa en donde el tiempo se extendió desde octubre de 2010 hasta febrero de 2011, el espacio fue en Santa Martha, Barranquilla, Cartagena y en otros sitios de la zona Caribe colombiana. Hubo 9 artistas internacionales quienes desarrollaron diferentes proyectos en sitios como Mompox, San Jacinto, Nueva Venecia, Nabusimaque, Palenque de San Basilio, Montes de María entre otros.
Todo está organizado alrededor de un eje principal llamado ‘Extensiones Curatoriales’, además estas exhibiciones están acompañadas por momentos académicos de topi de mesa redonda, talleres, conferencias y por el proyecto ‘Archipelia’, que como Lucas Ospina dice que son: “talleres de formación técnica y teórica, prácticas artísticas, escuela de mediadores, programas de mediación para todo tipo de públicos, preparación a docentes de colegios públicos y privados para el acompañamiento de sus alumnos, cartillas pedagógicas y actividades académicas para público especializado”
Del mismo modo para Lucas Ospina el Salón Nacional de Artistas se convirtió en un ‘no salón no nacional de no artistas sino de curadores’, pues dice que los curadores han cobrado más importancia que los mismos jurados de antaño, por el hecho que fueron ellos quienes se convirtieron inevitablemente en los autores de las exposiciones. Lo que no dice Ospina es que esta vez en el salón se va a desarrollar El proyecto curatorial Independientemente, el cual no sólo es un proyecto de carácter nacional sino internacional, en donde se invita a artistas extranjeros para desarrollar proyectos artísticos relacionados con el territorio y ´’con comunidades arraigadas a la cultura del Caribe’.
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