La obra que analizaré es del artista colombiano Manuel Hernández reconocido en el mundo del arte por sus obras abstractas.
Esta obra de es una fiel representación del arte abstracto ya que es una representación autónoma de lo que podría ser o no una referencia visual de algo del mundo real, propone una nueva realidad, una nueva visión.
Durante toda mi visita a la exposición de Hernández ubicada en el Museo de Artes Visuales de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, me esforcé por ubicar un motivo de la realidad que inspirara las obras, este esfuerzo fue infructífero en la mayoría de las pinturas. Sin embargo encontré esta obra de la cual tal vez por criterio propio encuentro como centro el cuerpo de un hombre.
En esta obra encontramos una composición de cuadrados y cilindros principalmente. Vemos colores negros, grises, rojos y azules. Como lo explicaré más adelante es una obra con cierto orden en su representación.
Me doy cuenta tras observar la pintura, de que no se trata tanto de encontrar qué es o a qué se parece la obra sino de encontrar su significado en las relaciones internas como las formas, los colores, las texturas, etc.
En mi opinión es una obra dinámica, me da la sensación de movimiento de no ser estático. Es una obra que muestra orden. El fondo del cuadro es neutro y no se alude a una profundidad. Encuentro una composición de colores fríos que transmiten sensaciones de soledad, seriedad. Estos tonos fríos en escalas de grises, blancos y negros, son rotos por un rojo anaranjado en la parte derecha del cuadro. Esto de cierta forma rompe con la continuidad y le da un toque de dinamismo que se complementa con cada uno de los trazos.
La obra da una sensación de peso en la parte superior, esto se debe a la concentración de colores en la misma. Las pinceladas de la obra son visibles y con textura muestra firmeza.
A pesar de sus colores, veo una obra con luz, iluminada principalmente es su punto de fuga por un color blanco. El cuadro puede leerse de izquierda a derecha y de arriba abajo, la mayoría de sus líneas son rectas, todo esto me transmite estabilidad. Por los colores, las figuras y los trazos veo esta pintura como una obra que muestra masculinidad y elegancia.
Por otro lado la pintura me da una ilusión de ser bidimensional pero sugiere corporeidad.
La obra per se me transmite sofisticación, tradición pero sobre todo soledad, tanta que no hay una identificación con qué o quién es, podría ser cualquier hombre.
Por: Mirna Amador 200710324
No hay comentarios:
Publicar un comentario